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Pov: Elle.
-Claroooo, y por eso habéis dormidos juntitos y abrazos. ¿Alguna excusa más? - preguntó indignada la chica de ropa ligera.
-No te lo creas, yo se lo que no he echo y estoy bien tranquila.
-Pues no lo deberías de estar - gritó y se avalanzó sobre mi.
No iba a usar mi fuerza, solo trataría de apartarla, tampoco pensaba utilizar mi don. Pero no la conseguía y no quería lastimarla.
Cuando seguramente ya llevase varios arañazos en la cara (no se cortaba las uñas ¿o qué?) En ese instante apareció Hugo y se puso entre medias de las dos, apartando la bestia de ropa ligera de mi.
-Malena ni la vuelvas a tocar o no querrás saber lo que es verme enfadado - dijo H en un tono frío - Vete a casa Elle, ahora voy yo.
Me marché con paso rápido, odiaba que tuviese que defenderme.
Pov: Hugo.
Cuando se marchó Elle, agarré de la muñeca a Malena. Me había acostado con ella un par de veces pero no tenía porque meterse en mi vida y tampoco tenía porque pegar a Elle.
-Te lo voy a decir claro. No te acerques a ella nunca más. - dije en tono cortante.
-¿Tienes miedo de que haga pedacitos a esa barbie?
-Tengo más miedo de que ella te haga pedacitos, no sabes con quién juegas, no tientes a tu suerte.
-Teníamos algo y lo vas a dejar todo por esa puta - inquirió.
-No teníamos nada, y con Elle no tengo nada, así que deja de ponerte celosa y márchate a tu casa de inmediato.
Mi tono de voz fue suficiente para que Malena se marchase por donde había venido. Cuando la vi alejarse, fui corriendo a buscar a Elle.
Estaba en el baño limpiándose las heridas de la cara, de los brazos y unos arañazos que tenia en la tripa.
Me apoyé en el pomo de la puerta a observarla, hasta que se dio cuenta de mi presencia.
-Oh estás aquí, siento lo del espectáculo y lo de abrazarme y todo el mal entendido con tu novia - dijo timidamente Elle.
-No es mi novia. Solo nos acostamos un par de veces, ya sabés, nada serio. - comenté tomando aire - Te agradezco que no le hicieras nada, se que la podías haber colgado de un árbol y haberla traumatizado para toda su vida.
-No tenía intención de hacerlo.
Se levantó la camiseta y se pasó un algodón con agua oxigenada por los arañazos. Me acerqué despacio y me planté enfrente de ella, le quité el algodón y le curé sus rasguños. Era mi culpa.
Le hice darse la vuelta y le levanté la camiseta, para comprobar si tenía más golpes pero solo tenía un par de ramas en la camiseta que quite. Durante todo el proceso Elle no paraba de quejarse.
-Ya no tienes nada más.
-Muchas gracias - dijo en tono irónico - Ahora si me dejas me voy a mi habitación a recoger. Y por cierto, no quiero que me defiendas más.
-A sus órdenes mi capitana - dije a modo de burla y por mi comentario me llevé un aguacero en el pelo - Te vas a enterar.
-Eso si me pillas - gritó y salió corriendo hacia el bosque.